Mijaíl Gorbachov, nació el 2 de marzo de 1931 en Stavropol, región del norte del Cáucaso. Fue el último dirigente de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS).
Por Lorena Malvestitti, Cecilia Guerra y Mariela Bilsky
Procedente de una familia campesina rusa, estudió Derecho en la Universidad de Moscú, se graduó en 1955 y allí se afilió al Partido Comunista. De regreso a su región de origen, realizó una rápida carrera política, ascendiendo a cargos de responsabilidad regional en las juventudes comunistas y en el partido. En 1985 llegó al poder del Kremlin con 54 años de edad. Recibió el premio Nobel de la Paz en 1990 por su rol en la finalización de la Guerra Fría y la reunificación alemana. Ese mismo año sufrió un intento de asesinato en plena Plaza Roja durante las celebraciones por la Revolución Bolchevique, el cual adjudicó en sus memorias a la KGB.
El magnate es recordado como el precursor de políticas vanguardistas que culminaron con la caída de la URSS. Entre estas políticas, promovió reformas con las que pretendió una reinserción internacional. De esta forma buscó modificar la imagen de la URSS con el objetivo de que deje de ser percibida como una amenaza y consolidar al socialismo por medio de la democracia. La necesidad de una transformación no significaba un cambio de modelo sino una adaptación del modelo socialista a las necesidades del pueblo. Entre sus reformas más destacadas se encuentran la Perestroika y la Glasnost. Mientras que la primera implicó una reestructuración económica, la segunda tuvo como propósito promover una mayor apertura, transparencia y liberalización del sistema político. Asimismo, fomentó la coexistencia pacífica y el desarme, promocionando una mayor participación de la URSS en organizaciones internacionales.
La guerra afgano-soviética y el régimen existente, incidieron en el descontento creciente de la población. Ante esta situación, Gorbachov pensó que podría regenerar el sistema desde arriba, intentando salvar ideales como la emancipación social y la igualdad, con un régimen menos represivo y un funcionamiento mixto de la economía con incentivos individuales, especialmente en la agricultura. La nueva política generó fuertes tensiones que el líder no pudo encauzar y llevó, en último término, a la disolución de la URSS.
Fue una figura controvertida para la sociedad rusa, que falleció el 30 de agosto pasado a los 91 años de edad.